El Parlamento Europeo votó 32 a 24 en contra de la versión final del proyecto de ley de la Unión Europea que generó cierta controversia sobre su alineación con el mecanismo de consenso de la prueba de trabajo relativa a la industria de las criptomonedas.
El proyecto de ley de Mercados para activos criptográficos (MiCA), que se encuentra en discusión desde el año 2020, se encontrará con una modificación; y es que finalmente, se ha accedido a las peticiones de la comunidad y no incluirá el artículo 2a que tanto preocupaba; y que tenía que ver con respecto a la minería digital. Tras conocerse esta decisión han sido diferentes partes las que mostraron su satisfacción con esta decisión que juega a favor de la comunidad bitcoiner.
La propuesta establece un marco regulatorio para la industria de las criptomonedas mediante un sistema de licencias en todo el continente y un reglamento único para los estados miembros de la Unión Europea. Sin embargo, también planteaba una disposición muy polémica, y es que contemplaba la posibilidad de limitar el uso de las criptomonedas de prueba de trabajo (PoW) como Ether y Bitcoin.
La prueba de trabajo es un protocolo de consenso distribuido en el que las transacciones son procesadas probando la posesión de las monedas digitales. Sin embargo, este mecanismo ha sido objetivo de un intenso sistema de votación por parte de un grupo de legisladores de la Unión Europea quienes manifestaron su preocupación por la energía; y en este sentido han querido recalcar que PoW exige un elevado consumo energético.
Esta sección de la legislación despertó la polémica, siendo eliminada posteriormente por la reacción de la industria. En ese momento el párrafo en cuestión fue eliminado, aunque ha sido este lunes cuando se ha sometido a votación la decisión final sobre la inclusión del mismo.
Rechazo a la limitación del uso de criptomonedas
La versión de un nuevo borrador había introducido una disposición que fue similar a la que fue eliminada previamente, pero que tenía algunos aspectos que eran atenuados con respecto a la original, tal y como quisieron recalcar algunos parlamentarios.
Con la nueva disposición del reglamento se indicaba que los criptoactivos estarían sujetos a unos estándares mínimos de sostenibilidad ambiental con respecto a su mecanismo de consenso usado para la validación de transacciones antes de ser emitidos, ofrecidos o admitidos a negociación en la unión.
Los activos digitales que sean emitidos, ofrecidos o que sean admitidos a cotización en la Unión Europea establecerán y mantendrán un plan de implementación de carácter gradual para así poder garantizar que se cumplen los diferentes requisitos que han sido estipulados para ello.
Por otro lado, hay que tener en cuenta que no existe la manera de que Bitcoin pueda implementar un plan fuera de PoW, haciendo que esto afectará a la criptomoneda. Así lo ha manifestado al respecto el proceso en torno a la ley de Mercados para activos criptográficos (MiCA).
La disposición también decía que los criptoactivos de uso intensivo de energía, ya que están en uso en la Unión Europea antes que los mecanismos de consenso PoW, que solo se tienen que aplicar a pequeña escala. No obstante, hasta el momento se desconocen cuáles serían esas bases en las que se establecerían a pequeña escala.
En cualquier caso, el Parlamento Europeo ha votado al respecto y finalmente tras el correspondiente encuentro, se ha saldado con un voto de 32 por 24 a favor de Bitcoin. Así pues, la comunidad bitcoiner se encuentra con una noticia positiva para sus intereses; y es que aunque se tomarán medidas que restringirán en parte a estos activos, no llegarán a las limitaciones que se buscaban en el Parlamento Europeo.