El Banco Central Argentino ha mostrado cambios en el sistema de importaciones para tratar de hacer frente a la pérdida de reservas por las compras llevadas a cabo en el exterior. Su nuevo esquema tendrá vigor hasta el 30 de septiembre de 2022, llevando a cabo diferentes medidas para frenar la salida de dólares.
Esto ha llevado al BCRA ha restringir el acceso al mercado cambiario (MULC) para las grandes empresas que quieran importar, al mismo tiempo que eleva en un 15% los límites para las importaciones de las pequeñas y medianas empresas (pymes).
El ministro de economía, Marín Guzmán, se encargó de defender esta resolución en declaraciones recientes, donde dejó claro que estas medidas tratan de priorizar el uso de divisas para la importación, motivo por el cual han decidido pasar a controlar a quién se le da acceso directo al mercado cambiario.
De acuerdo a lo comunicado, el nuevo sistema de pagos de comercio exterior responde a las necesidades extraordinarias de divisas para así atender a la necesaria importación de energía. EL objetivo no es otro que el de tratar de sostener el crecimiento económico y el desarrollo de las pequeñas y medianas empresas y además para evitar maniobras especulativas acerca de las importaciones.
El Banco Central de Argentina también equipara el tratamiento de las importaciones de bienes de capital y servicios. Todas aquellas que tengan licencias automáticas y no automáticas tendrán que pasar a financiarse por ellas mismas a lo largo de 180 días.
Asimismo, hay que tener en cuenta que el BCRA se encargará de la prefinanciación de exportaciones. Con esto pretende acelerar el ingreso de divisas. En este sentido, se ha decidido subir a 15 días la obligación de liquidar divisas frente a los 5 días actuales. Esta es una medida importante muy a tener en cuenta.
Las medidas del Banco Central de Argentina sobre el régimen de importaciones
Entre las nuevas medidas del Banco Central de Argentina sobre el régimen de importaciones cabe destacar las siguientes, aunque hay otras que también han sido de aplicación en el país latinoamericano:
- El nuevo sistema se extiende a las importaciones a las realizadas bajo licencia no automática y a la importación de servicios, teniendo vigencia por un trimestre.
- Las pymes quedan exentas de las exigencias actuales de financiar las importaciones por un incremento del 15% sobre el año anterior, teniendo un millón como límite.
- Las SIMI A tienen un acceso al mercado de cambios que equivale al promedio mensual de importaciones del pasado año 2021 más el 5% o del año 2020 más el 70%.
- Las SIMI B, que se corresponden con las licencias no automáticas, pueden acceder al mercado a partir de 180 días del despacho a plaza.
- Las importaciones de servicios se encuentran equiparadas en el tratamiento a las de bienes, y se permite el acceso al mercado por idéntico monto que en el año 2021 y en el caso de superar el importe el saldo a 180 días.
- Se amplían las posiciones arancelarias de bienes equivalentes a los producidos en el país que puedan tener acceso al mercado a partir de 180 días.
- La importación de bienes suntuarios que se pueden acceder a partir de los 360 días.
- Las importaciones de bienes de capital ha pasado a tener una norma que permite el pago del 80% en puerto de origen el 20% restante con la nacionalización.
- Se facilita la prefinanciación de exportaciones, lo cual servirá para acelerar el ingreso de divisas especialmente del complejo cerealero, con una obligación de que se produzca la liquidación de las divisas ingresadas que asciende de 5 a 15 días; y la financiación a largo plazo para precancelar deudas locales en moneda extranjera.
- Las nuevas medidas no afectan a las compras al exterior que llevan a cabo los servicios de courier.