Los reguladores de los Estados Unidos han dejado claro que las empresas de criptomonedas deben seguir las reglas convencionales. El criptoprestamista BlockFi alcanzó un acuerdo con la Comisión de Bolsa y Valores de los Estados Unidos (SEC) por cargos de que la compañía ofreció supuestamente cuentas de interés sin efectuar su registro bajo la Ley de Valores; y la empresa tendrá que hacer frente a un pago de 100 millones de dólares en multas.
BlockFi también acordó registrarse para la venta de Yield, un nuevo producto, y prometió hacer cumplir con las reglas de la Comisión de Bolsa y Valores de los Estados Unidos en un plazo de 60 días. Según se informa, la compañía estuvo comercializando cuentas de préstamo criptográfico no registradas desde marzo de 2019 hasta la actualidad; y apostó por realizar afirmaciones falsas y engañosas acerca de los riesgos en los préstamos.
Asimismo, BlockFi presentó el acuerdo como una manera de victoria, y es que la empresa lo vio como una mayor claridad regulatoria que le permitió tanto a ella como a la industria a dar pasos hacia adelante. Los clientes de sus cuentas con sede en Estados Unidos no pueden añadir nuevos activos hasta que se registre BlockFi Yield, momento en el que sus cuentas también cambiarán.
Los cargos y el acuerdo son los primeros de la SEC contra un prestamista de criptomonedas y reflejan un objetivo claro: la Comisión se encuentra dispuesta a aceptar estos servicios siempre que sean respetadas las diferentes normas que se consideren de aplicación también en el mercado físico. De esta manera, se ha ha producido una multa a una empresa de préstamo de criptomonedas por problemas de seguridad
El lobby de las criptomonedas gastó casi cinco millones para convencer a los reguladores de los Estados Unidos
Los lobbies se encuentran muy presentes en todos los negocios, incluso en uno que tiene poco tiempo de vida como los activos digitales. En el año 2021, las empresas vinculadas con las criptomonedas gastaron 5 millones de dólares en actividades de presión, lo que supone un 116% más que en el año anterior.
De cara al futuro, se espera que los grupos de presión aumenten su actividad en la misma manera que los reguladores lleven a cabo la supervisión de este tipo de activos. En el último lustro, el gasto total de los criptolobbies ha llegado a alcanzar los 9,6 millones de dólares. Esto supone un gran cambio con respecto al año 2017, cuando este gasto apenas llegaba a los 200.000 dólares. En cambio, las perspectivas apuntan a que se superen los 15 millones de dólares para finales del año 2022.
Ripple Labs, el desarrollador de protocolo de código abierto, es la compañía que más dinero ha destinado en Estados Unidos a financiar actividades de presión en estos cinco años, habiendo gastado cerca de 2 millones de dólares en actividades de lobby. Otro de los grandes lobbistas en la industria es Robinhood, una plataforma de trading que fue la que más invirtió el pasado año en grupos de presión de criptomonedas. En su caso, de los 9,56 millones de dólares destinados al criptolobby, Robinhood hizo un aporte de 1,35 millones de dólares, lo que supone casi el 14,2%.
Por otro lado, Coinbase pedía la creación de un nuevo regulador y un nuevo conjunto de normas específicas para las criptomonedas, en lugar de que se aplicaran leyes que realmente no se ajustan a las necesidades con las que cuenta el sector de las criptomonedas. A lo largo de los últimos meses ha habido diferentes avances en las criptomonedas y su regulación, un tema que continúa dando mucho que hablar y hace que hayas opiniones muy diversas con respecto a la diferente normativa aplicada.