Bitcoin es considerado un peligro por algunas entidades y organismos. En este sentido, Ana de la Cueva, secretaria de Estado de Economía de España, aseguró que con Bitcoin (BTC) existiría “un riesgo de impago“. Para ello, ha recalcado que el usuario no cuenta con la protección que sí ofrecen los sistemas de pago tradicionales cuando se produce un incumplimiento de la otra parte.
Así lo manifestó durante su participación en el III Encuentro Fintech, que se desarrolló el pasado 10 de febrero a través de internet.
La funcionaria habló, de esta manera, de las criptomonedas. En su intervención quiso recalcar que no existe un sistema de garantía en Bitcoin, que se trata de un sistema de persona a persona que lleva asociados una serie de riesgos. No obstante, en su intervención evitó mencionar un detalle importante; y es que, gracias al protocolo y la descentralización de Bitcoin, no existe la posibilidad de que no haya cumplimiento por parte de un emisor central.
Ana de la Cueva también indicó que la ausencia de un emisor reconocible en Bitcoin, lo que, a su juicio, hace que “se impida que pueda ser supervisado, obligado y sancionado“. En este sentido hay que ser consciente de que las reglas de consenso y diseño del sistema de incentivos en Bitcoin han evitado que hubiese fraudes en el sistema durante más de una década.
Al tratarse de un sistema de código abierto, todas las reglas son verificables por parte de cualquier persona, de manera transparente y sin que haya posibilidad a que se den modificaciones de carácter arbitraria.
Los riesgos del sistema
Entre los riesgos que Ana de la Cueva ha destacado, se encuentra su advertencia de que en el caso de que la adopción de Bitcoin se incremente, está la posibilidad de que se produzca una desestabilización financiera del sistema tradicional.
“Por el momento el uso de Bitcoin es muy limitado, pero el Banco Central Europeo ya advierte que una generalización podría desencadenar efectos indeseados en el funcionamiento del sistema monetario”, manifestó la funcionaria.
En su discurso, señaló la posibilidad de que las criptomonedas, además, se puedan utilizar para actividades ilícitas, como son el financiamiento del terrorismo o el blanqueo de dinero. “Por construcción, Bitcoin es anónimo y es intrazable, salvo que se obtengan las claves privadas del usuario”, manifestó al respecto.
En este sentido hay que tener en cuenta que en la red blockchain se registra cada transacción realizada, haciendo que el acceso a los datos se encuentre disponible para cualquier persona; y sin que sea necesario contar con las claves privadas de ninguno de ellas.
En muchas ocasiones, esta trazabilidad a la que está sometida Bitcoin permite detener a presuntos criminales. Además, las entidades bancarias tampoco están exentas de poder ser utilizadas para lavar dinero y para la comisión de hechos delictivos.
Bitcoin, un gran cambio
De la Cueva asegura que aseguró que Bitcoin “implica un gran cambio y plantea muchas cuestiones” aún por resolver, además de los riegos ya destacados. entre sus principales preocupaciones se encuentran las pérdidas que pueden llegar a sufrir los inversores.
La secretaria de Estado de Economía de España habló en su ponencia de ello, acudiendo luego a dos mesas redondas. Una de ellas se centró en el open finance y la nueva economía; mientras que la otra estuvo centrada en el terreno regulatorio y en su impacto en los medios de pago.
De esta manera, la funcionaria ha mostrado su opinión con respecto a las criptomonedas, en general y Bitcoin en particular. En este sentido ha vuelto a mostrar su oposición a este tipo de activos que tanta popularidad han adquirido en los últimos tiempos.
