Si algo está claro, es que las finanzas tradicionales han cedido un importante terreno a aquellas que se sustentan en un eje descentralizado, de ahí, que el mundo entero se encuentre viviendo a pleno, la evolución del dinero.
Con la tecnología blockchain como facilitadora del alcance de grandes retos, lo cierto es que con el correr de los años, lo que antes se catalogaba como imaginario, es ahora una realidad que cada vez más personas empiezan a disfrutar en busca de rendimientos. Puesto que las criptomonedas y en particular, el Bitcoin, son las grandes abanderadas de este movimiento, hay mucho más por descubrir.
¿Qué son las finanzas descentralizadas?
Este interrogante se constituye ciertamente, en la base requerida para adentrarse como es debido en los avances que ha conquistado la escena financiera global. Así las cosas, las finanzas descentralizadas (DeFi) llegaron para quedarse y poner al alcance de todos los interesados, soluciones pertinentes a las exigencias económicas de estos días.
Dejando claro que se conservan conceptos claves tales como, compra, venta, préstamos y ahorro, en este escenario se elige apostarle a la ausencia de una entidad central tal y como los ya acostumbrados bancos. En lugar de ello, se ocupan una serie de protocolos que, desde la transparencia, trabajan sin la existencia de intermediarios.
Cabe añadir que el objetivo de prescindir de intermediarios innecesarios, tiene mucho que ver con la iniciativa de que el usuario lleve a cabo un contacto directo, sin el tedio del papeleo y lo mejor de todo, con la promesa de la privacidad y seguridad.
Ahora bien, al no contarse con una regulación tradicional, se abona el terreno para estimular esa deseada sensación de independencia del sistema.
Una nueva forma de generar ingresos
El potencial de las divisas digitales se puede ejemplificar, desde algo tan básico como aquella carrera alcista que hizo posible que el precio del Bitcoin, haya logrado superar el valor del dólar estadounidense y del oro.
En efecto, las criptomonedas se han dedicado a proponer un desafío en el que no todos los activos acostumbrados resultan ganadores y ello se explica no solo señalando la creciente euforia propiciada por el momento digital que se vive por cuenta del Covid 19, sino también por la opción de alejarse de un sistema tradicional en el que ya no existe tanta confianza como antes.
Lejos ya de concebir las criptomonedas únicamente como medios de pago, se ha ido extendiendo la curiosidad sobre la inversión en ellas para obtener rendimientos a corto, mediano y largo plazo, configurándose todo un ecosistema dedicado a presentar cientos de opciones para conseguirlo.
Si bien al día de hoy se resalta la presencia de los inversores institucionales como protagonistas en el rally del bitcoin (BTC) asimismo, los inversores del común se encuentran dándose la oportunidad aprender y experimentar con una tecnología que ha dejado de ser vista como inalcanzable y demasiado compleja.
Las limitaciones en cuanto a posibles falsificaciones y unos costos mínimos para las distintas transacciones, avalan aun más, el que ahora las finanzas descentralizadas se hayan materializado.
