El interés creciente de los inversores institucionales para las criptomonedas, unido a la abundante liquidez de los mercados, así como las políticas de los bancos centrales con depósitos con intereses negativos y el apoyo de grandes inversores han hecho crecer la cotización de este tipo de activos, sobre todo en el caso de Bitcoin y Ethereum.
La salida al mercado de Estados Unidos del que ha sido el primer fondo cotizado en bolsa (ETF) vinculado a los futuros del bitcoin en lugar de la propia divisa cripto ha aumentado la legitimidad de estos activos; y al mismo tiempo facilita el acceso por parte de grandes inversores.
No obstante, hay que tener en cuenta que por el momento falta el último empujón desde el punto de vista normativa. Para que las criptomonedas se puedan consolidar de manera definitiva es importante que se conviertan en un medio de pago. Aunque cada vez se pueden realizar un mayor número de transacciones con criptomonedas, aún queda camino por recorrer. En el caso de España, este tipo de operaciones, en muchas ocasiones, son de permuta y no de compraventa.
Al no contar con un estatus de dinero legal, no es posible llevar a cabo acciones como abonar el salario de trabajadores o hacer pagos de las prestaciones a la Seguridad Social con criptomonedas. No obstante, hay que tener en cuenta que la propia ley no impide que se pueda usar para un pago en especie de los empleados, aunque en este caso, el importe no puede superar el 30% de las percepciones salarios del empleado. Así pues, Hay que tener en cuenta que los criptoactivos, realmente, se pueden usar como medio de cambio en cualquier ámbito, siempre y cuando las partes implicadas lo acepten como pago.
Bitcoin utilizado como una permuta
A pesar de que el bitcoin no tiene la consideración de dinero, si se oferta la adquisición de pisos con la principal criptomoneda, pero considerando el contrato como una permuta y no como una operación de compraventa. Cada uno de los contratantes se obliga a dar una cosa, que sería la vivienda, a cambio de recibir otra, que son los bitcoins. El gran inconveniente al respecto es que a la hora de pagar los impuestos, hay que ser consciente de que en una permuta se paga por las dos transmisiones, el doble que en un caso de compraventa.
Asimismo, el bitcoin también se utiliza para la constitución de negocios en una forma de sociedad limitada, considerando que se produce una aportación no dineraria.
Regulación de las criptomonedas
Tanto en España como en el resto de la Unión Europea se avanza para que las criptomonedas puedan pasar a ser considerados medio de pago legal. El nuevo registro de proveedores de servicios de criptomonedas del Banco de España que estará operativo a partir del próximo 29 de octubre; y los trámites que ya tiene preparados el regulador, harán que se abra una nueva puesta al uso de este tipo de activos.
De hecho, de cara al próximo año 2022 se espera que se ponga en marcha el reglamento europeo que regule los criptoactivos y aquellas plataformas que operan con los mismos. Entre las propuestas que recogerá se encontrará el endurecimiento de la concesión de licencias a los brókers, incluyendo la gestión de las carteras.
Aunque es una regulación que puede ser de gran ayuda para el uso de este tipo de activos, un problema al respecto es que podría quedarse desfasada en el caso de que se tarde mucho tiempo en ser aprobada. En cualquier caso, parece que las criptomonedas están más cerca que nunca de ser consideradas un medio de pago en España y Europa.
