Bitcoin está considerado uno de los activos que ha ofrecido un mayor rendimiento en toda la década. De hecho, ha logrado superar incluso a instrumentos financieros que siempre han sido utilizados como las acciones, los bonos y, sobre todo, el oro. Gracias a su crecimiento, Bitcoin ha logrado generar grandes beneficios a los inversores; y esto ha provocado que muchos inversores institucionales hayan decido incluir parte de sus carteras de inversión a diferentes activos digitales de Bitcoin y Ethereum.
Dado su rendimiento se puede ver como una gran oportunidad de inversión. Sin embargo, hay que tener en cuenta que los mercados de criptomonedas se han expandido más allá de los principales diez activos digitales. Actualmente, hay una gran cantidad de tokens de utilidad, de DeFi, de seguridad, de apuestas, de privacidad, etcétera.
Esto hace que en la actualidad no sea suficiente con crear una cartera de criptomonedas basada tan solo en Bitcoin y Ethereum. Para aprovechar los máximos beneficios de la industria y al mismo tiempo reducir los riesgos, es necesario diversificar la cartera de activos digitales.
La diversificación de la cartera de criptomonedas
Diversificar la cartera de criptomonedas es el proceso que implica desembolsar fondos de inversión en diferentes proyectos. De esta manera se logra reducir el factor de riesgo por si uno o más de los proyectos no llegan a funcionar de la forma esperada.
El objetivo de la diversificación es, por lo tanto, reducir los riesgos generales de la inversión. La idea es la de reducir el factor de los acontecimientos negativos, lo que se puede lograr a través de una inversión en diferentes tokens y coins, haciendo que no se pierda el valor de sus inversiones. Con esta finalidad, un inversor inteligente no pondrá todo su dinero en un solo activo, ya que en el caso de que fracase, puede perder gran parte de su dinero.
Es importante para todo el proceso gestionar las operaciones comerciales a través de una plataforma de intercambio de criptomonedas que sea fiable y de confianza. De esta manera, se magnifica la experiencia de la diversificación de cartera.
Cómo empezar una diversificación de carteras de criptomonedas
Existen diferentes estrategias que se pueden seguir a la hora de construir un portafolio de criptomonedas diversificado. Esto puede incluir el hecho de crear una cartera en la que hay que tener en cuenta diferentes factores.
Para empezar, hay que tener en cuenta que una cartera no debe estar íntegramente compuesta por Bitcoin. No obstante, aunque es recomendable que sea parte de un porcentaje considerable de las inversiones, se debe buscar la diversificación en otro tipo de activos.
Por su parte, el Ethereum continúa ocupando el segundo lugar en los mercados de criptomonedas, siendo un activo que tiene un valor real en su capacidad para poder facilitar la creación de aplicaciones descentralizadas y smart contracts.
La inversión en altcoins hace que se facilite al comerciante el apalancamiento de un crecimiento exponencial en un periodo relativamente corto. A pesar de que puede derivar en algunos riesgos , se pueden compensar con los activos seguros como Bitcoin.
Además, hay que tener en cuenta los tokens de ingresos pasivos. Al igual que ocurre con los dividendos, algunas criptodivisas ofrecen también intereses a los tenedores de tokens. El staking es un fenómeno que hace que se facilite las recompensas de las criptomonedas a cambio de mantener los criptoactivos en una cartera. Por ello, además de la diversificación, el staking también ayuda a lograr ingresos pasivos por tener criptomonedas.
Hay que tener en cuenta que las criptomonedas tienen una naturaleza volátil, aunque esto puede añadir algunas ventajas si las operaciones se ejecutan de la manera correcta, aunque también lleva asociado un factor de riesgo,